miércoles, 12 de marzo de 2008

Realidad o ficción


Hace un año sufrí un gran varapalo al enterarme que Mary Poppins no estaba basada en hechos reales. Tras ese primer golpe, mi vida se ha convertido en un sinvivir, para Navidad mis padres, tras 35 años de grata convivencia, me informaron con el rigor y el temple de un cirujano sin escrúpulos, que se habían proclamado Reyes Mágicos desde el mismo día de mi nacimiento. Como colofón a tanta ingratitud de mis informadores más cercanos, poco ha pasado desde que me he enterado que los niños no vienen de Paris… ¡Joder! Yo que vivía en un estado de plena felicidad, acudiendo a salas en las que siempre se proyectaba la realidad, ahora dudo hasta de mi propia sombra cada vez que entro en una sala. Tal es el punto que el otro día, tras ver Los Crímenes de Oxford, acudí a taquillas para reclamar que me devolvieran el dinero, que eso que había visto no podía ser realidad. Llamaron al encargado, tras una larga conversación, me dijo que me bajara de la parra, que en el mundo real el dinero no se devuelve, cuando el bien ya está consumido. Marché apesadumbrado… desde entonces me pregunto si la palabra bien, tiene el significado que hasta entonces yo le había otorgado.

jueves, 17 de enero de 2008

Western en el siglo XXI


Todas las señales indican que aún están vivos. No os dejéis engañar por la lacónica mirada, ambos sin lugar a dudas son dependientes. No se sabe quién apretará el botón primero, aunque se nos insista que habrá un apagón, otras señales aparecerán y la conversión al gran enchufón será irremediable. Los canales se multiplicarán, los catastrofistas dirán que el cine se acaba por la piratería, las pantallas crecerán y ocuparán más que un espacio simbólico en nuestro salón. Se perseguirá a quienes dejen de consumir y se buscarán nuevas fórmulas para que paguemos desde el sillón de casa. Posiblemente alguno de los dos muera en alguna de sus formas, aunque la dependencia subsista. Estamos sin lugar a dudas viviendo el western, la expansión de terrenos no explorados, y en todo western que se precie es inevitable que exista un gran “duelo” final.

jueves, 20 de diciembre de 2007

Old business never die


El otro día soñé que me peleaba con alguien, no sabía bien quien era, la proximidad me impedía verle la cara, mientras en el cuerpo a cuerpo recibía varapalos por doquier.. Al final en uno de ellos salí expulsado y pude verle de frente; resulto ser un gran edificio con articulación humana.

jueves, 6 de diciembre de 2007

Cine de autor...



Una vez hubo un futuro director, que fue a ver una película de un viejo autor, cuando ya habían sido nombrados como tales… Tras la película salió decidido a convertirse en un autor, comprometido y profundo. Mientras le daba vueltas a esto, se olvidó de pensar nada más, ya había visto lo que quería, todo su arte se concentraría a partir de entonces en largos planos, caras lánguidas a pocos centímetros del actor, y si es necesario hasta se comprometía a eliminar el trípode en algún momento de tensión dramática. Ahora se encontraba dispuesto a ser pionero, único y objetivo en su arte...

lunes, 26 de noviembre de 2007

Comedia de terror.



Uno decide pagar 14 ñapas por ver una película con un niñ@. Otras 4 o 5 si le gustan las palomitas o chuperretear golosinas con una cola.

Te sientas en la butaca y de pronto te bombardean con una hiperestimulación de imágenes a modo de BITS de aprendizaje (esos que están tan de moda en la escuela), advirtiéndote de lo malo que es robar.

Llegados a este punto, el mayor se toca los bolsillos.... y se pregunta: ¿Que no he pagado?. Te serenas; sabes que has elegido una comedia...

domingo, 18 de noviembre de 2007

Industria cinematográfica



Una vez vi una película de un chaval de 7 años, que nunca había ido al cine. Sin embargo toda la película se basaba en que para él, el cine era lo mejor.... Algo no funcionaba en esa película. Si hubiera sido de terror seguramente una voz obsesiva a modo de "slogan" le estaba llamando a entrar... ! Entra, entra, entra ¡.

Desenlace cinematográfico



PRIMER ACTO: Una chic@ te sonríe al pagar la entrada, un dependient@ tras comprar las palomitas, el acomodad@r te acompaña tras abandonar las atronadoras luces de la entrada y el suelo enmoquetado, para que no tropieces en la oscuridad y te acomodes....

SEGUNDO ACTO: Disfrutas o padeces la película

TERCER ACTO: Abandonas la sala por los ascéticos pasillos del cine con suelo de terrazo, te preguntas desorientado si es esta la salida correcta (esta vez sin ayuda), y tras una pesada puerta ignifuga te encuentras de nuevo con la puta calle.

Primeras reflexiones cinematográficas del día: NO TODOS LOS DESENLACES SON COMPLACIENTES